
Por Mariana Díaz Estudillo. En el universo del lujo, los grandes conceptos no se construyen solo a partir de un nombre ni de una dirección privilegiada. Se construyen desde la obsesión por el detalle, la pasión por la excelencia y la capacidad de ofrecer a los clientes una vivencia irrepetible.
En ese nivel de exigencia se ubica Honey, un nuevo destino gastronómico en la Ciudad de México que redefine el concepto de comfort food bajo estándares de clase mundial.

La propuesta es clara y contundente: cada aspecto de Honey ha sido diseñado con el propósito de trascender. La cocina parte de una reinterpretación de la American Comfort Food, pero llevada al terreno del refinamiento absoluto.
Video Recomendado
Los ingredientes provienen de un huerto propio; la panadería es elaborada íntegramente en casa, con recetas que marcan diferencia; y la selección de vajilla diseñada por Rory Dobner e importada desde Londres dialoga con los cuchillos Laguiole y los accesorios Alessi, creando una puesta en escena que fusiona diseño y funcionalidad.
El restaurante es una declaración de principios: demostrar que la comodidad no está reñida con el lujo, sino que puede potenciarlo. Cada platillo reconforta y sorprende al mismo tiempo, ofreciendo al comensal una experiencia que equilibra tradición y sofisticación.



La experiencia Honey se completa con espacios que multiplican su exclusividad. El Piano Bar propone un entorno clásico y chic, acompañado por un elenco artístico seleccionado con el mismo rigor con el que se elige cada ingrediente de la cocina. Los salones privados, diseñados para distintas ocasiones, ofrecen desde la máxima privacidad en comidas íntimas hasta un lounge con karaoke que, sin perder elegancia, se convierte en el escenario perfecto para noches reservadas solo a quienes saben disfrutar del lujo en clave contemporánea.
Honey no es un restaurante al uso. Es un club gastronómico donde los valores de familia, amistad y pertenencia conviven con un concepto de alta exclusividad. Su misión es clara: no solo satisfacer, sino anticipar y superar las expectativas de sus visitantes. Por eso, cada visita se convierte en un ritual donde el servicio impecable, la atmósfera cuidada y la atención personalizada son tan importantes como el propio menú.


En un mercado cada vez más exigente, Honey logra destacarse porque entiende que el verdadero lujo está en la suma de los pequeños gestos. El valet parking y el estacionamiento privado son apenas una muestra de ello: aquí no se trata solo de ofrecer comodidades, sino de garantizar que la experiencia sea completa desde el primer momento.
Honey es, en definitiva, un homenaje a la sofisticación cotidiana. Es el espacio donde la alta gastronomía se encuentra con el arte del detalle y donde cada visita se transforma en un recuerdo. Un destino obligado para quienes buscan no solo comer, sino vivir la experiencia plena del lujo en la Ciudad de México.
Honey se ubica en Paseo De La Reforma 2608, Lomas Altas, CDMX. Tel. 55 8052 6407 IG: @honey_restaurants