En un mundo donde el lujo evoluciona hacia la consciencia y la innovación, Johnnie Walker Blue Label presenta una edición limitada bajo la máxima de que menos es más y redefine la elegancia con una botella menos pesada y más sustentable.
Con solo 180 gramos de vidrio soplado a mano, este lanzamiento marca el comienzo de una nueva era para el diseño y la sostenibilidad en las bebidas espirituosas.
Durante cinco años, los equipos de diseño e ingeniería de Johnnie Walker trabajaron junto a maestros vidrieros externos en un proceso de prueba y aprendizaje que culminó en una obra maestra de precisión.
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El resultado: una silueta en forma de lágrima que reinterpreta el icónico perfil cuadrado de la marca, conservando su sofisticación, pero con una estructura que reduce drásticamente el uso de material sin sacrificar resistencia.
El arte de la ligereza
El tapón de aluminio calado, creado a partir de una sola pieza hueca, reduce peso y añade un sutil brillo metálico que complementa la transparencia del vidrio.
Su estructura de bambú y estuche protector, además de resguardar la botella, minimiza el impacto ambiental al optimizar transporte y materiales.
En conjunto, todo el diseño de Johnnie Walker Blue Label Ultra suma apenas 250 gramos, estableciendo un nuevo estándar en la categoría de lujo sustentable.
La mezcla al interior
En el interior de esta botella de whisky excepcional descansa una nueva expresión de Johnnie Walker Blue Label, elaborada especialmente para Ultra por la Master Blender, Dra. Emma Walker.
La mezcla reúne whiskies raros y de maduración prolongada provenientes de destilerías legendarias como Oban, Brora y Royal Lochnagar, junto con los célebres “whiskies fantasmas” —destilados de instalaciones que ya no existen— de Port Ellen, Port Dundas y Caledonian.
El resultado es una composición que rinde homenaje al pasado mientras abraza el futuro, uniendo el legado artesanal de Johnnie Walker con su visión hacia una industria más responsable.
Diseño con propósito
Más allá de su estética, Johnnie Walker Blue Label Ultra encarna una transformación estructural dentro de Diageo, compañía matriz de la marca.
Por primera vez en su historia, la firma ofrecerá licencias gratuitas sobre su patente de envases de vidrio liviano, invitando a toda la industria a sumarse a un cambio real hacia la sostenibilidad.
La botella utiliza materiales reciclados y reciclables, y su producción reduce significativamente la huella de carbono, consolidando la visión de un lujo que combina innovación, elegancia y responsabilidad.
“Esta botella no es solo un logro de diseño, es un símbolo de lo que es posible cuando se desafían los límites de la tradición en nombre del progreso”, comenta la Dra. Emma Walker.
Una edición para coleccionistas
Hay solo 888 unidades de Johnnie Walker Blue Label Ultra en todo el mundo, de las cuales 66 están disponibles en México. Cada botella está numerada individualmente y se presenta en una cuna diseñada especialmente para su silueta, con un discreto clip de apertura que libera la botella con un solo movimiento.
Esta edición limitada se encuentra, si es que aún hay disponibles, en El Palacio de Hierro y Vinoteca, Vinos América y Sautto.
Más que un whisky excepcional, Johnnie Walker Blue Label Ultra representa una pieza de diseño contemporáneo que invita a disfrutar —y preservar— lo que realmente importa.