El afamado diseñador Christian Dior adquirió un castillo con nueve habitaciones cerca del pueblo Grasse, al sur de Francia, tiempo antes de morir. Cuando descubrió este lugar, que muchos consideran cuna de la perfumería, tenía aproximadamente 20 años.
Estos increíbles paisajes florales resultaron fuente de inspiración para Miss Dior, Eau Fraîche, Diorama, Diorissimo y Eau Sauvage. Conocida como Château De La Colle Noire, la propiedad no fue solamente un sitio donde se producían perfumes sino toda una experiencia visual y sensorial para quien la visitaba.
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Ahora Dior vuelve a este mágico sitio para terminar de cumplir el sueño del diseñador y revivir el terreno repleto de flores. Después de una extensiva remodelación, será ahí donde el perfumista François Demachy instale su laboratorio olfativo para imaginar nuevas creaciones, en el centro de Fontaines Parfumées con plantas que broten dentro del Château De La Colle Noire.