Este 2025, la Manufactura de Alta Relojería suiza Audemars Piguet celebra su aniversario número 150 con una pieza tan especial como su historia: el Royal Oak “Jumbo” Extra-Thin Selfwinding Flying Tourbillon Chronograph RD#5. Limitado a 150 ejemplares, este reloj es la quinta entrega de la prestigiosa línea de investigación y desarrollo de la casa que, tras cinco años de trabajo, logra un hito técnico y estético que combina ergonomía, comodidad y excelencia mecánica en una caja de proporciones excepcionales.
Un ícono reinventado
Por primera vez en su historia, el Royal Oak “Jumbo” integra un cronógrafo automático y un tourbillon volante ¿El desafío? Mantener las proporciones legendarias de 39 mm de diámetro y 8.1 mm de grosor, diseñadas originalmente por Gérald Genta en 1972. Así, Audemars Piguet rediseñó el mecanismo desde cero para conservar la pureza estética del modelo y dotarlo de proporciones inéditas.
Al alcance de la mano
Esta edición responde a un estudio ergonómico integral: desde la caja hasta el movimiento. El resultado son pulsadores que requieren menos fuerza y recorrido, inspirados en la suavidad de un botón de smartphone. A ello se le suma un sistema selector en la corona y el uso de cristales tipo “glass box” que preservan la delgadez de la pieza sin sacrificar su complicación. El cronógrafo nunca había sido tan intuitivo.
Una nueva complicación
El corazón de esta creación es el Calibre 8100, que reimagina la función de “reset” gracias a un mecanismo patentado basado en cremallera y piñón. El resultado: reinicios instantáneos en menos de 0.15 segundos y un contador de minutos de salto inmediato, un detalle muy apreciado por coleccionistas. Su reserva de marcha de 72 horas y oscilante periférico en platino subrayan su robustez y refinamiento.
Video Recomendado
Cinco generaciones de innovación
El RD#5 se suma a una genealogía de piezas visionarias: del RD#1, que fijó un nuevo estándar acústico, al RD#2, que reinventó el calendario perpetuo ultraplano, pasando por el RD#3, que introdujo el tourbillon volante extraplano, y el RD#4, la pieza más compleja jamás producida por la casa. Hoy, el RD#5 revoluciona la ergonomía del cronógrafo, un terreno casi inalterado durante décadas.
Ligereza, resistencia y un guiño emblemático
La caja y brazalete combinan titanio con BMG (Bulk Metallic Glass), una aleación rica en paladio que aporta dureza, resistencia a la corrosión y un brillo singular. La carátula Petite Tapisserie en el característico tono azul “Bleu Nuit, Nuage 50” realza la estética atemporal, mientras que el grabado “150 Years” en el reverso celebra el aniversario de la manufactura y la exclusividad de esta edición.
Precisión y estilo
Desde sus orígenes en el siglo XIX hasta su consolidación como símbolo de precisión y sofisticación, el cronógrafo ha sido una de las complicaciones más deseadas. Audemars Piguet, que introdujo sus primeros cronógrafos en los años treinta en series limitadas, continúa esta tradición con el RD#5: una pieza que rinde homenaje a la herencia relojera de la maison al tiempo que proyecta su futuro.
El Royal Oak “Jumbo” Extra-Thin Selfwinding Flying Tourbillon Chronograph RD#5 es más que un reloj: es la síntesis de 150 años de savoir-faire, innovación y audacia. Un testimonio de cómo la Alta Relojería evoluciona sin renunciar a la herencia que la define. Para quienes buscan una pieza que combina legado, exclusividad y vanguardia técnica, el RD#5 no es solo un reloj: es el tesoro de cualquier coleccionista.