En el mundo del lujo auténtico, los objetos se vuelven una extensión del estilo personal. Son piezas que no necesitan exagerar para dejar claro que pertenecen a otra categoría. Bajo esa visión llegan las nuevas Peugeot 3008 y 5008, dos SUVs que redefinen el lujo francés contemporáneo con una mezcla de diseño, ingeniería y una ejecución interior que solo aprecia quien realmente sabe de autos.
Durante su lanzamiento en Cancún, tuvimos la oportunidad de conocerlas de cerca y llevarlas a carretera en un recorrido que nos permitió disfrutar, a nuestro propio ritmo, de la Riviera Maya. Entre curvas suaves, tramos costeros y una parada para comer en el restaurante NAINO, en Valladolid, descubrimos que este par está pensado para algo más que trasladarte: está diseñado para envolverte.
Estética que evoluciona hacia lo esencial
Ambos modelos reflejan una identidad visual depurada: proporciones equilibradas, superficies tensas y un frente completamente renovado donde la parrilla y la iluminación LED crean una firma inmediata. Peugeot 3008 apuesta por un perfil dinámico y sutilmente deportivo, mientras que la versión 5008 propone un enfoque más amplio y robusto, pensado para quienes buscan espacio sin sacrificar distinción.
Los faros PIXEL LED de “3 garras”, el nuevo emblema de la marca y las líneas limpias dan como resultado vehículos que proyectan sofisticación sin ruidos visuales. Es lujo que no necesita explicarse.
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Un interior construido desde la artesanía moderna
La cabina es donde estas SUVs revelan su verdadera intención: ofrecer una experiencia sensorial. El uso de materiales suaves, la precisión de los ensambles y la iluminación ambiental crean un ambiente que recuerda a la nueva generación de diseño francés: minimalista, pero con carácter.
En nuestra experiencia de manejo, esta intención se vuelve evidente desde el primer contacto. Los asientos con función de masaje, una rareza en el segmento, transforman un simple traslado en un momento contemplativo. La ergonomía del volante compacto y la distribución de los controles permiten que la atención fluya hacia lo esencial: la conducción y el disfrute.
La pantalla panorámica curva de 21’’ no solo es un centro de información; es un objeto de diseño. Su posición, resolución y acabado convierten al Peugeot i-Cockpit® Panorámico en un espacio ergonómico pensado para maximizar la concentración y el placer de conducir. Aquí cada elemento cumple una función concreta, pero también contribuye a una atmósfera sofisticada y coherente.
Tecnología que responde a una filosofía de manejo
Peugeot integró asistentes avanzados que elevan la experiencia sin reemplazarla: control de crucero adaptativo, monitoreo de punto ciego, cámaras de alta definición y una calibración del tren motriz enfocada en suavidad y eficiencia. La insonorización es notable, creando una burbuja de calma incluso en trayectos urbanos.
Y cuando el trayecto se extiende, como en nuestro viaje, la propuesta toma aún más sentido: la estabilidad, la moderación en la respuesta del motor y la suspensión calibrada con intención de confort permiten que la ruta se disfrute como un tramo continuo, sin tensiones. Los i-Toggles, además, personalizan rápidamente clima, iluminación, música o navegación, logrando que cada conductor “moldee” el ambiente según su estilo sin perder la sobriedad del diseño.
Potencia y seguridad: precisión técnica al servicio del placer de conducir
La ingeniería detrás de Peugeot 3008 y 5008 está pensada para entregar una respuesta equilibrada y confiable. Ambas incorporan un motor turbo de 1.6 litros que desarrolla 180 hp y 300 Nm de torque, administrados mediante una transmisión automática de 6 velocidades afinada para priorizar suavidad en ciudad y estabilidad en carretera. El conjunto se siente progresivo, sin sobresaltos, con una entrega de potencia lineal que acompaña la intención de cada maniobra.
En el apartado de seguridad, las SUVs integran un sistema completo de asistencias que refuerzan la confianza del conductor: 6 bolsas de aire, frenos ABS, control de estabilidad ESP, cámara de visión 360º, sensores frontales, laterales y traseros, además de Hill Assist Descent Control y el sistema Grip Control, que optimiza la tracción según el terreno. Esta combinación de electrónica, calibración y estructura permite que el vehículo responda con precisión incluso en superficies demandantes, sin perder la suavidad característica del manejo francés.
Las nuevas Peugeot 3008 y 5008 representan una declaración: el lujo francés evoluciona hacia la sutileza inteligente. Son SUVs que combinan estética, técnica y una visión de diseño que habla directamente a quienes valoran la calidad por encima de la ostentación. Un lujo para conocedores.